“El perdón se les debe ofrecer a las víctimas, no a los victimarios” este fue el principal reclamo que hicieron los familiares de las victimas del Palacio de Justicia en un plantón que se realizó el pasado 3 de febrero en las instalaciones del Tribunal Superior de Bogotá.

Este encuentro se realizó debido a las declaraciones del presidente Juan Manuel Santos el  1 de febrero, en las descalifica el fallo de segunda instancia, por las desapariciones forzadas durante la toma del Palacio de Justicia, el cual fue emitido por el Tribunal Superior de Bogotá el 30 de enero de 2012. Con respecto a este fallo el presidente pide perdón al Ejército y al ex presidente Belisario Betancourt.

Esta declaración es una clara ofensa para los familiares de las victimas que perecieron durante y después de la toma del Palacio realizada por guerrilleros del M-19 en 1985, ya que el perdón se les debe ofrecer a las victimas, no a los victimarios.

Tanto los familiares de las victimas como las organizaciones defensoras de Derechos Humanos, consideramos que es evidente que las declaraciones del presidente Santos, lo que busca es que el fenómeno de la impunidad crezca, y así beneficiar a los altos dignatarios responsables de los graves crímenes contra la humanidad, como en este caso; la desaparición forzada de personas.

El hecho de pedir perdón a los victimarios y no a las víctimas, muestra una flagrante subordinación contra el estado de derecho, dado que la sentencia emitida para el caso de desapariciones del palacio de justicia, establece obligaciones de reparación de victimas y que en cabeza del ministro de Defensa y de los altos militares, se les pida perdón a las victimas por los daños causados y no al contrario.

La declaración hecha por el primer mandatario es un claro ataque a la justicia y a la autonomía que deben tener los jueces de la República para dictar sus decisiones. El hecho de pedir perdón a los victimarios, envía un mensaje de intimidación y aislamiento a las pocas o casi nulas garantías que existen para los familiares de las victimas a tener acceso a la verdad. No es función del presidente estar ofreciendo  perdones a quienes han sido condenados por delitos de desaparición forzada y mucho menos que lo haga  en nombre de todos los colombianos.

Es por esta razón que seguiremos apoyando a todos los familiares de personas que han sido victimas de desapariciones forzadas y seguiremos luchando para que cese la impunidad.