En el Catatumbo avanzan nuevos planes energéticos alrededor del petróleo, el carbón y la palma africana o aceitera, adaptada ahora como agrocombustible. También se hacen exploraciones en cobre y otros minerales. Y para saquear todo eso se está montando una infraestructura grande que se ensambla con la red de transporte ligada a la costa Atlántica: el río Magdalena, las troncales, las líneas férreas y los puertos.

Sucede que el modelo económico capitalista y su estilo de vida están agotando rápidamente las reservas de petróleo, sobretodo a partir de la globalización de su sistema. Esa crisis energética ha colocado en aprietos el mundo del capital. Ahora, como el petróleo y otros energéticos fósiles hacen parte importante del do- minó de la globalización neoliberal, lo que ocurra en el mercado energético tiene efectos en toda la economía mundial.

Por eso es que los desbarajustes que se armaron en el sistema financiero desde el año pasado, y que han afectado los negocios empresariales en todos los países, se resuelven si los capitalistas encuentran más reservas energéticas y otros recursos que signifiquen grandes ganancias. Ahí está entonces el gobierno entregándole a las grandes empresas millones de hectáreas de bloques petroleros y de títulos para la minería del oro, el platino, el cobre, el hierro, etc.

El problema es que quienes terminamos pagando los platos rotos somos los pueblos, porque para recuperar el ritmo de las ganancias las empresas intensi- ficarán la explotación d el trabajo y de los territorios. Y en ese afán por buscar recursos energéticos claves, como el carbón o el petróleo, o de inventarse nuevas fuentes, como los agrocombustibles, le echan mano a regiones buenas para eso como el Catatumbo.

Necesitamos conocer mejor qué es lo que las empresas transnacionales conspiran sobre nuestra región, para que tengamos argumentos y propuestas a la hora de enfrentar sus abusivas intervenciones. Es urgente que estemos preparados, lo que nos exige:

  • Conocer muy bien cuáles son los proyectos que se plantean para El Catatumbo, cómo es que se van a aplicar, qué consecuencias tienen para la región, quiénes están detrás de todo eso…
  • Analizar la situación en todas las asociaciones y ordenar una crítica con bastante fundamento sobre lo que pensamos de esa cuestión, y qué propuesta tenemos desde nuestro proyecto de vida.

Esta cartilla es en consecuencia un recurso pedagógico que queremos aportar para que hagamos el estudio del asunto, que sea del provecho de todas y todos, lo que nos ayudará a cualificar los liderazgos. Aunque la hemos pensado desde nuestra región, esperamos que la podamos intercambiar con otras regiones en donde las empresas están haciendo lo mismo.

Aquí solamente escribimos algunas cosas muy generales sobre la cuestión de la energía. La intención es que la cartilla pueda provocar el interés por conocer más del tema, y que sea un motivo también para encontrarnos, desde la vere- da, hasta el municipio y la región, para poder colocar toda nuestra energía en función de la vida.

La convocatoria es a que defendamos nuestro territorio y nuestro proyecto de vida frente a la globalización capitalista de la energía. La amenaza es grande, pero cuando resistimos al terror hace unos años, pudimos probar que nosotros éramos más grandes. Solamente necesitamos estrechar nuestras solidaridades, actuar como un solo pueblo catatumbero frente a todas las intervenciones externas y continuar la marcha:

¡Por la integración, la vida y el territorio!

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Cartilla Catatumbo 1 noviembre