Pan Para el Mundo es una voz colectiva cristiana que urge a los líderes de nuestra nación a luchar contra el hambre en este país y el mundo. Somos animados por la gracia de Dios en Jesucristo, para trabajar por un mundo sin hambre.

Misión
Los miembros de Pan para el Mundo escriben cartas, o llaman y visitan a sus congresistas para abogar por legislación que ayudaría a personas con hambre en Estados Unidos y alrededor del mundo. Pan para el Mundo los prepara para trabajar junto con otros en la lucha y para comunicarse con sus Congresistas. Educamos a nuestros miembros sobre los asuntos políticos relacionados al hambre y también sobre cómo poner nuestra fe en acción para ser más efectivos en nuestra abogacía.

Pan para el Mundo trabaja junto con Iglesias, universidades, y otras organizaciones para movilizar cristianos en los Estados Unidos para tomar acción.

La meta de Pan para el Mundo es de acabar con el hambre para el 2030. La organización cree que cada persona tiene una responsabilidad importante para acabar con el hambre, especialmente los líderes del gobierno estadounidense. Trabajamos para cambiar las políticas públicas y las condiciones económicas que permiten que el hambre persista. Buscamos soluciones de largo plazo y líderes dispuestos a abogar por legislación enfocada a resolver las causas de raíz del hambre.

Tenemos la experiencia de ganar legislación bipartidista que ayuda a personas con hambre a alimentar a sus familias. Tenemos éxito porque nuestra base de miembros y activistas trabajan en concierto con denominaciones nacionales, redes y organizaciones apoyadas por el personal de Pan para el Mundo en Washington DC y en otras ciudades.

La gracia de Dios vive nosotros y nos ayuda a sostener el compromiso político que se necesita para superar el hambre. Creemos que es posible acabar con el hambre durante nuestras vidas.