Crece la preocupación por la crisis de seguridad que está viviendo el departamento del Cauca, por causa de los enfrentamientos entre la guerrilla y el ejército en la zona del corregimiento de El Palo, en el municipio de Caloto y zona 2 del resguardo Huellas de Caloto, en este lugar se han presentado fuertes explosiones que han afectado a la comunidad, inicialmente se originó la suspensión de las clases en algunos colegios.
Los mismos hechos produjeron el desplazamiento de los habitantes del centro urbano del Palo, hacia la vereda el Nilo, y son por lo menos 50 familias, que suman alrededor de 200 personas entre niños y adultos los que se han tenido que movilizar de sus viviendas por causa de los hostigamientos, entre los desplazados hay más de 130 menores de edad.
Las familias que se desplazaron para salvar sus vidas y la de sus hijos, ahora temen por los bienes dejados en sus lugares de residencia ya que el municipio se encuentra deshabitado y no saben que pueda ocurrir mientras ellos no están.
La situación que esta viviendo la comunidad caucana es bastante complicada, los hostigamientos que se presentan a diario son una clara muestra de que no se respetan los derechos de las personas, por lo tanto exigimos respeto. Mientras tanto, La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca –ACIN, se encuentra alrededor del caserío de la Comunidad del Nilo realizando un respectivo acompañamiento a estas personas que han sido victimas de los ataques.
Por otro lado el Gobierno Nacional en nombre del Ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, reconoció mientras se reunía con varios alcaldes de el departamento, que la situación de seguridad que se está viviendo en el Cauca, es compleja.
Ha pasado dos días de los ataques y hay una relativa normalidad en el corregimiento del Palo Municipio de Caloto, sin embargo no se reanuda las clases en este sector, y las familias campesinas comienzan a evacuar poco a poco hacia sus lugares de origen, pero existe una gran preocupación y temor a que continúen los hostigamientos.