Desde la Asociación MINGA, como organización de derechos humanos, acompañante de las comunidades de la región del Catatumbo y defensora de la vida, máximo imperativo ético que nos mueve, rechazamos y condenamos el secuestro del niño Cristo José Contreras Arévalo, hijo del Alcalde del municipio de El Carmen, Norte de Santander.
Bajo ninguna circunstancia, los autores de este crimen pueden justificar su comisión. Los derechos de los niños y niñas están por encima de cualquier interés político, económico o social.
La imposición de la violencia a las comunidades del Catatumbo debería llegar a su fin. Es preciso exigir el respeto, la integridad física y emocional de Cristo José y su inmediata liberación. Este hecho nos debe convocar a una movilización contundente de la sociedad como mecanismo para la defensa de la vida en el territorio y la legitimación de la vía política para resolver los conflictos que en esta región se presentan.
Igualmente expresamos toda nuestra solidaridad al señor alcalde Edwin Contreras, su esposa y demás familiares, y exigimos a sus captores que además de respetar su vida e integridad física, regresen al niño inmediatamente al seno de su hogar.
Bogotá, octubre 5 de 2018