Con un significativo acto simbólico que invocó la voluntad de los presentes y los ausentes en la construcción colectiva de propuestas alternativas conjuntas para enfrentar las lesivas intervenciones al territorio amazónico, se dio  inicio al I Encuentro binacional comunitario “Modelo extractivista y fumigaciones” Colombia-Ecuador.  

En este encuentro realizado los  días 27 y 28 de febrero de 2015, en Puerto Asís, Putumayo, las cerca de 175 personas delegadas de comunidades campesinas, indígenas y de las negritudes organizadas en procesos sociales de la región andino-amazónica pertenecientes a los departamentos de Caquetá, Putumayo, Cauca y Nariño en Colombia, y a las provincias de Sucumbíos e Imbabura en Ecuador, estuvieron acompañadas de representantes internacionales de movimientos sociales de Panamá, Argentina y el País Vasco[1] quienes compartieron los análisis y apuestas comunes que han venido desarrollando desde sus experiencias propias frente a la problemática común: El Extractivismo.

Wilson Suárez, delegado de la Asamblea Permanente de Organizaciones sociales de Sucumbíos, realizó una  ubicación general sobre la política extractivista en América Latina, particularmente en la frontera colombo ecuatoriana; los impactos en los órdenes sociales, políticos  ambientales y económicos de este modelo, así como las incoherencias de los gobiernos progresistas y las alternativas que desde el campo popular se implementan. La  segunda exposición alrededor del tema de las fumigaciones estuvo a cargo de  César William del Comité de Integración del Macizo CIMA, quien desde la experiencia de las organizaciones campesinas del Cauca presentó una serie de iniciativas para enfrentar y alternar esa política, basadas en la autonomía de los procesos,  además cuestionó la persistencia en la aplicación del Plan Colombia, cuyo fracaso ha sido demostrado desde diferentes evidencias  académicas, sociales, políticas, económicas, ambientales y culturales.

El encuentro que estuvo planteado para posibilitar el dialogo entre los procesos que comparten esta problemática (que algunos identificaban como un problema local) impulsó un intercambio de las experiencias comunitarias nacionales más representativas; Sobre Putumayo intervino la Asociación Campesina de Puerto Asís quien compartió cómo este territorio está totalmente titulado a las empresas petroleras y mineras, lo cual fue complementado por la delegación del Resguardo Nasa Kiwnas Cxhab quien mostró la situación de los pueblos indígenas, y luego por la Asociación de Cabildos Inga precisando la condición de las comunidades del medio Putumayo.

El Comité de Integración del Macizo, representando las delegaciones de Nariño y Cauca, nos ilustró la problemática minera y de fumigaciones que existe en esos territorios, y las maneras como están frenando esas intervenciones. Así mismo la Comisión por la Vida del Agua que articula varias asociaciones comunales, de jóvenes y de mujeres del sur del Caquetá, denunciaron los impactos de la locomotora minera y petrolera en estos otros territorios amazónicos.

Así mismo se abrió un espacio para compartir las  experiencias internacionales presentes, en el cual las organizaciones invitadas tomaron como referencia las exposiciones anteriores para manifestar sus apreciaciones sobre el extractivismo en América Latina, cómo se implementa en cada uno de los casos y cuáles son las dinámicas organizativas que se han planteado como respuesta. Las intervenciones ubicaron además los contextos particulares en donde este tipo de conflictos se desarrollan. Posteriormente se permutaron preguntas y respuestas entre el auditorio y los panelistas internacionales. Según Javier Marin,  integrante de la Asociación MINGA y coordinador de este encuentro la participación de los internacionales “significó un soporte moral y político a las luchas de resistencia y construcción alternativa de las comunidades allí presentes, acostumbradas a recibir durante muchos años la atención simplemente asistencial por parte de diferentes organismos internacionales.”

Tras nutridos debates en las mesas de trabajo de extractivismo y fumigaciones, se dieron avances  entorno a propuestas de defensa de los territorios, y para la integración de las  organizaciones: Se decidió apostar por mayores acercamientos entre procesos sociales de la región andino amazónica ubicados en los departamentos colombianos de Nariño, Cauca, Caquetá y Putumayo,  y las provincias ecuatorianas de Imbabura y Sucumbíos. Identificar y sistematizar las problemáticas comunes, con actores y estrategias de intervención similares así como los impactos sociales,  ambientales, y  las dinámicas de resistencia de las comunidades.

Para los asistentes  el Encuentro  da un nuevo aire a las movilizaciones en contra del modelo extractivista y, en mayor medida, de las fumigaciones y el Plan Colombia, así como al tema de la participación institucional, el cual se asumía de manera pasiva sin poner en juego allí las alternativas populares. Así mismo colocó en diálogo internacional y nacional las problemáticas y alternativas locales, abonando terreno hacia una acción comunitaria más autónoma, con enfoques y planes propios, y con disposición a las articulaciones, como el Coordinador Nacional Agrario  y el Congreso de los Pueblos.

Ante la proyección de las articulaciones algunas de la propuestas que continúan su camino de discusión versaron sobre: un encuentro con organizaciones sociales y políticas de la frontera ecuatoriana, un espacio de coordinación amazónica frente al extractivismo y las fumigaciones, la red agro alimentaria de la región andino amazónica,  la demanda conjunta de todos los afectados por el Plan Colombia y procesos de educación popular que acerquen más a las comunidades base, los intercambios de experiencias para el impulso de acciones regionales en ejes de trabajo comunes:

o   Educación popular – escuela de paz

o   Política pública local para protección del agua

o   Planes de ordenamiento territorial

o   Cultura, identidad amazónica y memoria colectiva

o   Inventario socio ambiental de los territorios. Conocimiento del territorio

o   Mecanismos de participación para la exigencia colectiva de derechos

o   Fortalecimiento de las asociaciones locales y su integración

o   Reconocimiento de los derechos de los campesinos

o   La veeduría ambiental comunitaria

Todo lo anterior fue conducido ante la necesidad de perfilar una propuesta de desarrollo comunitario para la región andino amazónica, en horizonte del buen vivir donde  ni el petróleo ni la coca sean los modelos económicos de las comunidades, ni sus formas de vida, ya que ellos lo  que defienden es su ser amazónico y agroalimentario. Para eso se unen, para vencer la amenaza común: el modelo extractivista y las fumigaciones.

Video: Amenaza Común: Modelo extractivista y fumigaciones 

[1]El Frente nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales FRENADESO de Panamá, el Frente Darío Santillán-FDS de Argentina, la Asamblea Permanente ASPCAPD de Ecuador y la Red de Hermandad con Colombia-REDHER del País Vasco.