Como parte del segundo ciclo del proceso de formación a líderes y lideresas del Catatumbo que venimos adelantando de la mano del Comité de Integración Social del Catatumbo – CISCA y el Departamento de Trabajo Social de la Universidad Nacional de Colombia; realizamos dos sesiones de Escuela que tienen como objetivo el fortalecimiento de liderazgos sociales, el análisis y la comprensión de la problemática regional y, especialmente, la construcción colectiva de insumos para una Agenda Social para la Paz a nivel municipal.
Así, del 24 al 26 de junio nos reunimos en San José del Tarra con más de 40 mujeres, hombres, niños y niñas para intercambiar saberes alrededor de los conflictos que se presentan a nivel municipal en términos territoriales, sociales, económicos y culturales. Además, se aclararon dudas alrededor de la implementación del Acuerdo de La Habana y el proceso de negociación que se adelanta en Quito. Este intercambio, sumado al conocimiento y las iniciativas ya existentes en el municipio, permitió la construcción de propuestas concretas para dinamizar espacios de socialización y participación de las comunidades desde veredas y corregimientos en espacios como la Mesa Social para la Paz.
Ya en la segunda sesión realizada del 30 de junio al 2 de julio en La Vega de San Antonio, confluyeron durante tres días consecutivos más de 50 líderes y lideresas de los municipios de La Playa de Belén y Ábrego. En esta sesión la mística jugó un papel fundamental en el que la memoria trajo a flote el nombre de personajes dedicados a la música, el arte y el trabajo comunitario. En esta escuela se resaltó la historia del paro del Nororiente y la importancia de potenciar iniciativas populares en el marco de la construcción de una Agenda de Paz. Resaltamos de manera importante la participación de varios líderes y lideresas de la Asociación Campesina del Catatumbo – ASCAMCAT, con quienes se recordó a varios de dirigentes que han sido asesinados, desaparecidos o desplazados de la región por sus actividades comunitarias.
En ambas jornadas se contó con participación de niños, niñas y jóvenes, quienes acudieron de manera activa y de acuerdo al contenido propuesto como parte de la Escuela. De sus intercambios se destacan las miradas que tienen de los conflictos, las múltiples violencias que viven cotidianamente y en particular, la forma en que representan a través de cuentos, personajes y obras de teatro, lo que para ellos y ellas significa la Paz desde sus territorios. Su participación se convirtió en un componente fundamental para la construcción de una Agenda de Paz que incluya las propuestas de los niños, las niñas y los jóvenes como un actor protagónico en la región.
Estas dos sesiones de escuela configuran la continuidad de un ciclo de formación que tendrán los demás municipios de una región caracterizada por abandono del Estado, con múltiples experiencias autónomas de vida digna y dispuesta a ampliar los mecanismos de participación en el camino de construcción de Paz. Para estos líderes y lideresas, es fundamental sentirse parte de la implementación de procesos de negociación que tengan en cuenta como principal insumo sus experiencias y saberes.
A continuación algunas imagenes de las escuelas:
Escuela municipal Hacarí:
Vea aquí la galería fotográfica completa…
Escuela municipal La Playa de Belén y Abrego: