Llamamos a las autoridades  y comunidades  indígenas, la Minga Social y Comunitaria, Organizaciones de Defensores de Derechos Humanos  y todas las organizaciones y personas que  creen y apoyan  la justicia para que  actuemos frente al caso del compañero Feliciano Valencia. 

El  comunero  FELICIANO  VALENCIA  vocero de la Minga social y comunitaria, ex consejero del CRIC,  fue acusado de secuestro  simple, lesiones personales y tortura,  por  un ejercicio legítimo desde el Derecho Propio en aplicación de Ritual de remedio desde la justicia propia,  aplicada   por las Autoridades Indígenas a un  Militar sorprendido en flagrancia realizando actos delictivos dentro del territorio de Dialogo, Convivencia y Negociación  de la María Piendamo, en el marco de la Minga social comunitaria del 2008.

Como es de pleno conocimiento de la opinión pública a nivel nacional e  internacional  desde  el  día 12 de octubre 2008, las comunidades indígenas  del Cauca nos encontrábamos en asamblea comunitaria en el resguardo de la María, realizando de manera pacífica la exigibilidad de derechos como pueblos indígenas y  manifestando nuestra oposición  frente a las políticas del Gobierno  que  plantean el despojo de los territorios y  desmonte de los  derechos  fundamentales de los colombianos y colombianas.

El día 14 de octubre las comunidades concentradas tomamos la decisión de hacer presencia sobre la vía Panamericana para exigir la presencia del gobierno con el fin de acordar una salida concertada a los requerimiento de las comunidades;  como respuesta se recibe la orden de desalojo precedida de una fuerte arremetida de la fuerza pública mediante la utilización del ESMAD, tanquetas, carros blindados, soldados contraguerrilla, y miembros de la policía nacional quienes de  manera violenta   atacaron  a la población civil, en el que  resultaron  120  personas heridas entre ellos niños, niñas, Jóvenes, Mujeres, y ancianos  y  fue asesinado el  comunero  indígena Taurino Ramos.

Este día en horas de tarde  miembros de la guardia Indígena, en desarrollo de sus funciones  de control, sorprenden en flagrancia al Sr. JAIRO DANILO CHAPARRAL SANTIAGO en actos delictivos dentro del territorio indígena, orientado a desprestigiar la minga social y Comunitaria. Al militar se le encontraron elementos de uso privativo de las fuerzas militares: Un camuflado del ejercito completo, un radio de comunicaciones, dos antenas para radio de comunicaciones, dos camisetas militares, cuaderno con apuntes sobre instrucción militar y registro de armas de fuego y explosivos, un teléfono celular, un maletín militar. Dichos elementos estaban guardados en un maletín negro intentando no ser notado por la comunidad.

En el proceso de investigación se confirmó que el Sr. JAIRO DANILO CHAPARRAL SANTIAGO, tenía afinidad indígena y era soldado profesional. Ante la conducta delictiva las  Autoridades Tradicionales conformaron una comisión de investigación para llevar a cabo el proceso de averiguación, y cuyo resultado determinó que el Sr. JAIRO DANILO CHAPARRAL SANTIAGO, utilizando sus rasgos indígenas intentaba  infiltrar a la Minga con fines no sanos, además de colocar en riesgo la integridad física y social de los y las comuneras presentes en dicho evento en el  Territorio  de la María.  Ante lo sucedido, las comunidades indígenas, en ejercicio de las funciones Jurisdiccionales que permite ejercer justicia propia dentro del marco Constitucional,  (Art. 246 de la Constitución Política de Colombia) obrando dentro de su territorio, y en el marco del Derecho Propio, en asamblea general, procedieron a aplicar el respectivo Ritual de Remedio, en el marco de los usos y costumbres (9 Juetazos de corrección).

El  consejero  FELICIANO VALENCIA,  obedeciendo el Mandato comunitario, cumplió la única función de comunicar el sentido del Ritual de Remedio al militar, facultado por las Autoridades Indígenas y la comunidad presente alrededor 20.000 personas. Es decir su papel no es una responsabilidad individual ya que desde  nuestros  usos y costumbres  la asamblea  es quien define y es la máxima autoridad.

Esta acusación  para las comunidades indígenas  representa  el desconocimiento a  los derechos  que como pueblos indígenas nos confiere la Constitución Nacional, los Convenios Internacionales, la Declaración de los  derechos humanos de los Pueblos Indígenas del 2007  y lo ratifica las diversas sentencias de la Corte Constitucional.(945 /2007, T-552/ 2003, T- 496 /1996)

Por otra parte es una forma de persecución política  al movimiento indígena y popular  quien en los últimos años  nos hemos movilizado en el país para reclamar nuestros  derechos y convocar a la construcción de un proyecto de país. Además es una  forma de criminalización de  la protesta social,  que va en contra de la Ley Nacional.

Si como  pueblos indígenas, organismos de  defensores de derechos humanos y organizaciones  sociales  callamos frente a estos hechos  muy seguramente se abrirán otros procesos jurídicos a líderes y defensores de los derechos humanos, no podemos permitir   que  la justicia  continúe siendo para los procesos comunitarios alternativos  mientras  los  verdaderos responsables de masacres, desplazamientos y  corrupción en  nuestro país  están en la impunidad.

Convocamos a todos y todas a acompañar a Feliciano Valencia en la audiencia de imputación de cargos que se realizara en  el palacio de justicia de Popayán  el día viernes 11 de noviembre desde 8:00 y  a pronunciarnos  para defender y posicionar la justicia propia a través de la UNIDAD que nos caracteriza.