La persecución y exterminio contra el pueblo Awá no cesan. Desde los tiempos de la explotación minera del oro, la colonización agraria campesina, el modelo neoliberal y, en la actualidad, diversas dinámicas del conflicto armado ligadas especialmente al narcotráfico, los indígenas Awá que habitan el departamento de Nariño han sido víctimas de la violencia con la cual buscan doblegar su dignidad y despojarlos del territorio, y sin un Estado que los proteja y garantice su pervivencia como lo indica la Constitución Política.

Por años hemos sido testigos de la criminalidad con la que distintos actores se han ensañado contra este pueblo. No es posible olvidar actos como los del 2009 con la masacre Tortugaña Telembí donde alrededor de 12 personas fueron asesinadas y más de 850 desplazadas forzadamente en un hecho atribuido a la extinta FARC-EP. Tampoco, que del 2016 a 2019 fueron asesinados 26 indígenas Awá, se registraron alrededor de 64 amenazas directas contra líderes y lideresas de este pueblo, y más de 800 fueron obligados a desplazarse ante diversos eventos que les impedian continuar sus labores de defensa de la vida y el territorio.

A pesar de los más de 300 acuerdos pactados en el marco del plan de salvaguarda étnico Awá con el Auto 004-2009, el Auto 174-2011, el Auto 620-2017 y las medidas cautelares que la CIDH otorgó a este pueblo, la violencia continúa y se profundiza en el último periodo. Tan solo de marzo de 2020 a agosto de 2021, la organización Unidad Indigena del Pueblo Awá registró 109 agresiones en contra de sus comuneros y líderazgos sociales y tradicionales, 44 de estas corresponde a homicidios, 29 amenazas, 6 desapariciones, 6 hechos de desplazamiento forzado, 8 enfrentamientos armados y 6 hostigamientos que pusieron en riesgo la vida de la población civil, 4 confinamientos, 2 amenazas que generaron extorsiones y desplazamientos y 4 afectaciones por minas antipersonal y municiones sin explotar MAP/MUSE.

Incluso, en las últimas semanas y a pesar de los permanentes llamados de este pueblo, desde sus resguardos, organizaciones de base, la Unidad Indígena del Pueblo Awá UNIPA y el Cabildo Mayor Awá de Ricaurte CAMAWARI, y organizaciones defensoras de derechos humanos que les acompañamos, las agresiones se recrudecen en sus distintos resguardos. En ese marco, los grupos armados han cometido 2 homicidios, 1 secuestro acompañado de tratos cruelos, inhumanos y degradantes, y más recientemente instalaron una MAP/MUSE, en la cual, el pasado 30 de septiembre perdió la vida Jhon Alberto Pascal Pascal de 25 años de edad, coordinador de la guardia indígena del Resguardo Awá El Gran Sábalo, donde, además, el mismo dia fueron retenidos 4 comuneros, quienes fueron sacados directamente de sus hogares, uno de ellos un menor de 7 años de edad, y fue amenazada la lideresa Martha Lucia Ortiz, directora del Centro Educativo Indígena Awá El Verde.

Solo el primer día del presente mes de octubre se presentaron amenazas a importantes lideresas de este pueblo como enuncia el más reciente comunicado de UNIPA: “siendo las 10 de la mañana, se presentó una amenaza mediante llamada telefónica a Aura Melba López García lideresa y Consejera de Economía y Producción de la organización UNIPA, a Yurani López Moreano Gobernadora del Resguardo Indígena AwáNunalbí Alto Ulbí, a una de las mujeres integrantes de la Asociación Productiva Granja el Maíz y a las familias de la comunidad Alto Guelmambí del resguardo en mención. En la amenaza se exige el desalojo y cese de actividades de liderazgo en el territorio y advierten que si se rehúsan a ello la comunidad Alto Guelmambí será declarada objetivo militar. Es importante resaltar que este territorio pertenece a un resguardo indígena Awá asociado a UNIPA; es inconcebible que actores armados mediante el uso de la violencia amenacen con despojar del territorio ancestral que es propiedad colectiva.“ Lo anterior genera alta preocupación por precedentes donde las amenazas contra la comunidad Awá y sus liderazgos se han materializado en hechos como masacres y desplazamientos colectivos forzados.

Desde la Asociación MINGA repudiamos estos sistemáticos hechos de agresión contra el pueblo Awá, condenamos la inoperancia de las diversas autoridades locales, departamentales y nacionales para protegerles y evitar esta tragedia, especialmente de la Brigada 23 del Ejército Nacional y el Comando de Policía Departamental cuya omisión ha permitido el aumento de las vulneraciones a este pueblo, por parte de actores armados que hacen presencia en este territorio.

Nos sumamos al llamado emitido por el pueblo Awá al Estado colombiano en su conjunto a generar garantías para su pervivencia y detener el riesgo de exterminio al que están avocados en el más impune silencio del gobierno nacional “garantizando el derecho a la vida, atendiendo los problemas estructurales, reduciendo la inequidad y brechas en los territorios más afectados por el conflicto armado a través de acciones concretas, así como la activación de las rutas necesarias de acompañamiento a la población para evitar una masacre y desplazamiento...”

Llamamos a la Fiscalía General para que investigue a fondo; a la Procuraduría General para que discipline a los funcionarios que no cumplen su responsabilidad de garantías y al Gobierno Nacional para que cumpla con los compromisos adquiridos durante tantos años. A la comunidad internacional, las organizaciones defensoras de derechos humanos internacionales y nacionales, y ciudadanía en su conjunto, rodear al pueblo Awá para evitar su extinción como pueblo originario.

Asociación para la Promoción Social Alternativa – MINGA

5 de octubre 2021

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Comunicado Awá